NO CREAS QUE NO TE QUIERO
POR NO HABLARTE, CIELO,
ES QUE NO SALE ALIENTO
CON EL QUE EXPRESAR MI SENTIR
Y, POR MÁS QUE LO INTENTO,
CON PENA Y DESAZÓN, NO PUEDO.
SEAN, PUES, MIS OBRAS
AL ESTAR CERCA DE TÍ,
COMO AQUELLOS RIOS
QUE MUDOS VAN AL MAR,
ROTO SU MELANCÓLICO IR,
COMO EL TERCO SILENCIO,
DE ESTE CUERPO ENFERMO
DE ACTOS Y MIL PALABRAS
CON LAS QUE PODERTE DECIR
LO MUCHO QUE POR TÍ SIENTO.