jueves, 31 de enero de 2013

OSCURO

Yo que amé del sol
su rayo más rubio
y tuve mi jarra de agua
tan clara como el dos
o el cuatro, tan clara
como el seis o el ocho.

Yo que fui ciclón y poeta,
silvestre y enamorado,
político y moralista
que al perro llamaba perro
y al hombre injusticia.

Yo que fui el más cuerdo
de los hombres que huelen
a lata de cerveza y ahora,
ahora voy por las calles
sin amor ni herradura,
más oscuro que el uno
y el tres y el siete,
más errado que la muerte,
tan confuso que no acierto
siquiera al teclear las letras
y algunas se me olvidan,
o se parten o dividen,
o cambian de lugares,
o desaparecen...

(Batania)



miércoles, 30 de enero de 2013

CANTO A TERESA

¿Por qué volvéis a la memoria mía
tristes recuerdos del placer perdido,
a aumentar la ansiedad y la agonía
de este desierto corazón herido?

¡Ay!, que de aquellas horas de alegría
le quedó al corazón sólo un gemido,
y el llanto que al dolor los ojos niegan
lágrimas de hiel que al alma anegan.

¿Dónde volaron, ¡ay! aquellas horas
de juventud, de amor y de aventura,
regaladas de músicas sonoras,
adornadas de luz y de hermosura?


Imágenes de oro bullidoras,
sus alas de carmín y nieve pura,
al sol de mi esperanza desplegando,
posaban, ¡ay! a mi alrededor cantando...

¡Oh Teresa! ¡Oh dolor! Lágrimas mías,
¡ah!, dónde estáis que no corréis presurosas?
¿Por qué, por qué como en los mejores días,
no consoláis vosotras mis pesares?


¡Oh!, los que no sabéis las agonías
de un corazón que sufre a millares,
¡ay!, desgarrado y que ya no llora,
¡piedad, tened, de mi tormento ahora!...
(Espronceda)